Blockchain y Derecho: Usos, Desafíos y Regulación Jurídica de la Tecnología Descentralizada

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Por Germán Peláez Moll

Blockchain puede definirse como un protocolo informático que permite transacciones de manera descentralizada. Este protocolo actúa como una cadena de bloques de información unidos entre sí de forma descentralizada y pública, almacenándose en unos equipos interconectados a través de una red de ordenadores distribuidos, los nodos. Los nodos trabajan de forma colaborativa para almacenar, compartir y preservar el registro distribuido, utilizando un algoritmo de consenso para comprobar y garantizar la validez de cada bloque."

"Desde un punto de vista técnico, las redes blockchain pueden diferenciarse según el nivel de acceso de los nodos validadores en dos grandes categorías: las blockchains sin permiso y las blockchains permisionadas. En las primeras, cualquier usuario puede participar como nodo validador sin necesidad de autorización previa. Para evitar fraudes, la validación de transacciones se basa en mecanismos de consenso como Proof of Work (PoW). Por otro lado, en las blockchains permisionadas, solo un grupo limitado de nodos está autorizado para validar transacciones, conforme a criterios de confianza preestablecidos."

"Uno de los desarrollos más relevantes en este sentido es la tokenización de activos, que consiste en la representación de activos del mundo real a través de tokens en una blockchain, permitiendo su intercambio en un registro descentralizado, seguro e irreversible."

"Es importante destacar que un token no es el activo en sí, sino tan solo su representación digital dentro de una blockchain. No se trata del bien en su forma física, sino de un derecho sobre él que adquiere una nueva forma de circulación."

"Uno de los usos más relevantes de Bitcoin y otras criptomonedas es su función como reserva de valor, especialmente en economías con alta inflación y restricciones cambiarias. Aunque la volatilidad de muchas criptomonedas dificulta su adopción como refugio seguro, el desarrollo de las stablecoins ha permitido sortear esta limitación."

"Las stablecoins son activos digitales diseñados para mantener un valor estable al estar respaldados por una moneda fiduciaria, materias primas u otros activos reales. Algunas de las más utilizadas, como USDT, USDC y DAI, siguen la cotización del dólar estadounidense, ofreciendo así una alternativa más confiable para preservar el poder adquisitivo sin depender del sistema financiero tradicional."
"Si bien el término contrato inteligente (smart contract) puede sugerir que existe una similitud con los contratos jurídicos tradicionales, es fundamental precisar que se trata de un concepto propio del ámbito tecnológico. Un smart contract es un programa informático que se ejecuta de forma automática en una blockchain cuando se cumplen determinadas condiciones previamente establecidas por las partes."
"Sin embargo, su estructura rígida plantea limitaciones para aplicar figuras jurídicas como la lesión, la revisión por desequilibrios sobrevinientes, la valoración de los incumplimientos por causales de fuerza mayor, el reajuste de cláusulas abusivas, etc. En efecto, la ejecución automática es ajena a conceptos abstractos como la buena fe contractual y no puede ponderar principios jurídicos como lo haría un juez a través de la sana crítica racional."

"La aplicación de blockchain en los registros inmobiliarios puede aportar seguridad, transparencia e inmutabilidad a los sistemas de gestión de la propiedad. Actualmente, los registros tradicionales dependen de organismos públicos y notarios, lo que puede generar demoras, riesgos de fraude y corrupción. En cambio, al almacenar títulos de propiedad en una blockchain, se crea un registro descentralizado, inalterable y verificable, eliminando la necesidad de confiar en una autoridad central y reduciendo la posibilidad de fraudes, como la venta múltiple de una misma propiedad."

"No obstante, la propiedad de un token representativo de un inmueble no equivale al derecho real de dominio sobre el bien. El dominio del inmueble sigue adquiriéndose conforme a las reglas tradicionales atinentes al título y al modo. No obstante, la tokenización permite representar digitalmente ciertos derechos vinculados al inmueble, facilitando su comercialización, fraccionamiento o administración en entornos digitales, sin que ello implique una mutación en el régimen jurídico de la propiedad inmobiliaria."
"La certificación de documentos ha dependido históricamente de notarios y registros físicos, lo que conlleva costos elevados, demoras y una burocracia compleja. La tecnología blockchain ofrece un sistema descentralizado que permite verificar la autenticidad de documentos sin necesidad de una autoridad central, lo que plantea interrogantes sobre su impacto en la función notarial y registral."

"Mientras algunos autores sostienen que la blockchain podría reemplazar a los notarios eliminando intermediarios, otros argumentan que su verdadero potencial radica en la integración con la práctica notarial. Desde esta perspectiva, la blockchain no desplaza la figura del notario, sino que puede optimizar los procesos, reducir la burocracia y aumentar la eficiencia en la certificación documental, beneficiando tanto a los profesionales como a la sociedad."

"Uno de los principales desafíos en la gestión de los derechos de autor es la identificación precisa de la autoría y la fecha de creación de una obra. La tecnología blockchain ofrece una solución innovadora al permitir que un artista, escritor o compositor registre su obra en una cadena de bloques, generando un 'hash' único con un sello de tiempo inmutable que prueba su existencia en un momento determinado."

"Sin embargo, la tokenización no autorizada de obras ajenas en el ámbito del criptoarte plantea un grave conflicto en materia de derechos de autor y propiedad intelectual. A diferencia de lo que muchos creen, la tecnología blockchain no verifica la identidad del creador ni certifica que quien tokeniza una obra sea el titular legítimo de los derechos sobre ella."

"A pesar de que la blockchain se caracteriza por su inmutabilidad y seguridad, no está exenta de vulnerabilidades. Los smart contracts, que automatizan acuerdos y procesos, pueden presentar fallas en su programación que deriven en errores irreversibles."

"En el ámbito legal, la falta de regulación clara sobre la blockchain y los smart contracts genera incertidumbre en sectores donde la seguridad jurídica es esencial, como los contratos comerciales y los títulos de propiedad."

"Finalmente, la descentralización, si bien es una de las principales fortalezas de la blockchain, también plantea dificultades en la reversión de fraudes o la corrección de errores en las transacciones. A diferencia de los sistemas tradicionales, donde existen mecanismos administrativos o judiciales para impugnar actos viciados, en el ámbito de la blockchain la falta de una autoridad central complica la reparación de daños.

Blockchain y Derecho: Aplicaciones y desafíos de la implementación de la tecnología blockchain en el Ámbito Jurídico

Introducción

 

La tecnología blockchain es, sin duda, una de las más disruptivas de la actualidad[1]. Aunque suele vincularse principalmente con Bitcoin y las criptomonedas, su potencial trasciende ampliamente el ámbito financiero, con aplicaciones en propiedad intelectual, propiedad industrial, registros, smart contracts, cadenas de suministro y muchos otros sectores.

 

Este artículo busca desmitificar la tecnología blockchain, explorando su origen, funcionamiento y aplicaciones en distintos ámbitos. Además, se analizarán tanto sus aciertos como sus limitaciones, con el objetivo de ofrecer una comprensión integral sobre su potencial expansión futura.

Historia, orígenes y primeros usos de la tecnología blockchain

 

El origen de la tecnología blockchain está estrechamente vinculado al surgimiento de Bitcoin, lo que explica su asociación en el imaginario colectivo. En 2008, una persona o grupo bajo el seudónimo de Satoshi Nakamoto creó Bitcoin como un sistema de dinero electrónico descentralizado, marcando el inicio de la adopción progresiva de esta tecnología. La blockchain, base tecnológica de Bitcoin, permite registrar transacciones de forma inmutable y descentralizada mediante un sistema de consenso distribuido. Su propósito inicial fue facilitar la transferencia de valor sin intermediarios, eliminando la necesidad del sistema bancario y financiero tradicional[2].

 

Blockchain puede definirse como un protocolo informático que permite transacciones de manera descentralizada. Este protocolo actúa “como una cadena de bloques de información unidos entre sí de forma descentralizada y pública, almacenándose en unos equipos interconectados a través de una red de ordenadores distribuidos, los nodos. Los nodos trabajan de forma colaborativa para almacenar, compartir y preservar el registro distribuido, utilizando un algoritmo de consenso para comprobar y garantizar la validez de cada bloque[3].

 

A grandes rasgos, blockchain puede conceptualizarse como un libro contable, una bitácora o una base de datos en la que solo es posible agregar nuevas entradas, sin posibilidad de modificar o eliminar las existentes. A diferencia de un registro centralizado, este "libro contable" está replicado en múltiples computadoras o nodos, lo que garantiza su integridad y seguridad. Su arquitectura protege las transacciones contra alteraciones, ya que una vez asentadas en la cadena de bloques, se vuelven irreversibles[4]. Este sistema descentralizado y seguro permite rastrear transferencias y determinar con precisión la titularidad y disponibilidad de unidades de valor. En el caso de Bitcoin, los usuarios no poseen físicamente monedas, sino la capacidad de transferir unidades dentro de este registro inmutable. Cuando blockchain se emplea exclusivamente para crear este tipo de registros y las unidades funcionan como medio de pago, se configura el concepto de criptomoneda o payment token.

 

Desde un punto de vista técnico, las redes blockchain pueden diferenciarse según el nivel de acceso de los nodos validadores en dos grandes categorías: las blockchains sin permiso y las blockchains permisionadas[5]. En las primeras, cualquier usuario puede participar como nodo validador sin necesidad de autorización previa. Para evitar fraudes, la validación de transacciones se basa en mecanismos de consenso como Proof of Work (PoW), que exige la resolución de complejos problemas criptográficos antes de añadir un nuevo bloque a la cadena, como ocurre en Bitcoin. Por otro lado, en las blockchains permisionadas, solo un grupo limitado de nodos está autorizado para validar transacciones, conforme a criterios de confianza preestablecidos. En este modelo, la validación de bloques se realiza a través de mecanismos como Proof of Authority (PoA), en el que los validadores son entidades reconocidas, o Proof of Stake (PoS), que asigna validadores en función de la cantidad de tokens en su posesión.

 

Derivada de esta estructura de validación, surge una clasificación más amplia basada en el nivel de apertura de las redes. Las blockchains abiertas, como Bitcoin y Ethereum, suelen basarse en una arquitectura permissionless (sin permiso), permitiendo la participación sin restricciones. En contraste, las blockchains cerradas siguen un modelo permissioned (permisionada) y pueden dividirse en redes de consorcio, gestionadas por un grupo de entidades, y redes privadas o empresariales, administradas por una única organización. A esta clasificación tradicional se ha sumado una nueva categoría de redes híbridas: las blockchains públicas permisionadas. Estas combinan un sistema de validación basado con permisos con un modelo de gobernanza descentralizado, buscando un equilibrio entre los beneficios de las blockchains abiertas y las de consorcio[6].

 

Este esquema de clasificación no busca abrumar al lector con tecnicismos, sino evitar generalizaciones excesivas que asuman que todas las blockchains comparten las mismas características que aquella cadena de blockchain donde se asienta bitcoin.

 

La tecnología analizada permite diversas modalidades de uso. Desde un enfoque más pragmático que técnico, algunos autores han definido la blockchain como un libro digital incorruptible de transacciones económicas, programable para registrar no solo operaciones financieras, sino prácticamente cualquier tipo de valor[7].

 

Todas las áreas de trabajo humano requieren, en mayor o menor medida, de registros irreversibles. De allí que, con un esfuerzo de creatividad, y valorando los límites y obstáculos de esta tecnología, es posible pensar su aplicación en áreas muy diversas.

Expansión de los usos de la blockchain. La tokenización de activos.

 

Aunque la tecnología blockchain suele asociarse principalmente con las criptomonedas, su potencial se extiende mucho más allá de este uso inicial. Uno de los desarrollos más relevantes en este sentido es la tokenización de activos, que consiste en la representación de activos del mundo real a través de tokens en una blockchain, permitiendo su intercambio en un registro descentralizado, seguro e irreversible[8].

 

A diferencia de los payment tokens, como Bitcoin, que se limitan a registrar transacciones y determinar la titularidad de unidades monetarias digitales, otros tipos de tokens van mucho más allá.

 

La referida tokenización ya es utilizada al día de hoy, por ejemplo, para transaccionar representaciones de activos como un bien inmueble, una obra de arte o una participación en un proyecto. De esta forma, se puede negociar la titularidad de estas representaciones en una blockchain sin las restricciones y costos asociados a los sistemas financieros convencionales.

 

Una de las ventajas más significativas de la tokenización es que facilita la inversión en activos de cualquier parte del mundo, eliminando barreras geográficas y reduciendo los costos de intermediación.

 

Además, el uso de la blockchain en este contexto agiliza las transacciones, mejora la transparencia y promueve una mayor liquidez en los mercados. También posibilita el acceso de pequeños inversionistas a activos que antes estaban fuera de su alcance mediante el fractional ownership, es decir, la división de un activo en partes más pequeñas y accesibles. Esta fragmentación reduce los umbrales de entrada a inversiones que tradicionalmente requerían grandes sumas de capital, democratizando el acceso a oportunidades financieras.

 

Sin embargo, es importante destacar que un token no es el activo en sí, sino tan solo su representación digital dentro de una blockchain. No se trata del bien en su forma física, sino de un derecho sobre él que adquiere una nueva forma de circulación[9].

 

Mientras que los tokens respaldados por activos reales (producto de la tokenización de activos) derivan su valor del producto que representan, las criptomonedas o payment tokens (como bitcoin) funcionan de manera distinta: su precio depende exclusivamente de la oferta y la demanda en el mercado, así como de la confianza en la seguridad, estabilidad y aceptación social del sistema en el que operan.

 

Esta diferencia es trascendente para el inversor, quien debe entender por qué los precios de las criptomonedas pueden llegar a ser muy volátiles mientras que los tokens de inversión tienen cotizaciones acordes a la economía real[10].

 

En definitiva, la tokenización de activos no solo amplía las posibilidades de inversión y transacción en los mercados globales, sino que también redefine las dinámicas de acceso a la propiedad y el financiamiento, impulsando una mayor inclusión financiera y eficiencia en la circulación de valor.

Blockchain, resguardo de valor y mecanismo de sorteo de restricciones cambiarias

 

Uno de los usos más relevantes de Bitcoin y otras criptomonedas es su función como reserva de valor, especialmente en economías con alta inflación y restricciones cambiarias. Aunque la volatilidad de muchas criptomonedas dificulta su adopción como refugio seguro, el desarrollo de las stablecoins ha permitido sortear esta limitación.

Las stablecoins son activos digitales diseñados para mantener un valor estable al estar respaldados por una moneda fiduciaria[11], materias primas u otros activos reales. Algunas de las más utilizadas, como USDT, USDC y DAI, siguen la cotización del dólar estadounidense, ofreciendo así una alternativa más confiable[12] para preservar el poder adquisitivo sin depender del sistema financiero tradicional. En países con fuertes fluctuaciones monetarias y restricciones al acceso a divisas extranjeras, estas criptomonedas han adquirido una gran relevancia, al permitir a los usuarios protegerse de la depreciación de la moneda local sin necesidad de recurrir a mecanismos oficiales de compra de dólares.

 

Además de su función como resguardo de valor, las stablecoins han demostrado ser un mecanismo eficiente para sortear restricciones cambiarias y facilitar transacciones internacionales sin intermediarios. Al operar en una blockchain, su acceso y uso no dependen de regulaciones bancarias estrictas ni de aprobaciones gubernamentales, lo que las convierte en una opción atractiva para individuos y empresas que buscan estabilidad financiera en entornos macroeconómicos adversos[13].

Blockchain y emisión de moneda digital nacional

 

Si bien el propósito inicial de Bitcoin, el primer caso de uso de la tecnología blockchain, fue habilitar un sistema financiero descentralizado al margen de cualquier gobierno, con el tiempo esta tecnología también ha sido adoptada por los propios Estados para la emisión de monedas digitales nacionales.

 

Un caso paradigmático es el yuan digital (e-CNY), lanzado por China en 2020, que utiliza blockchain para mejorar la eficiencia del sistema financiero y reforzar el control estatal sobre la circulación monetaria. A su vez, otros países han seguido este camino con proyectos propios de Monedas Digitales de Banco Central (CBDC, por sus siglas en inglés). Estados Unidos, la Unión Europea y varias economías emergentes han desarrollado o están en proceso de desarrollar sus propias monedas digitales, explorando modelos híbridos que combinan la seguridad y trazabilidad de la blockchain con la estabilidad del sistema financiero tradicional[14].

 

Estos desarrollos muestran cómo la tecnología blockchain, inicialmente concebida como una alternativa descentralizada, ha evolucionado para integrarse en sistemas financieros nacionales, los cuales, recuérdese, bitcoin pretendía reemplazar o contrarrestar.

Blockchain y contratos inteligentes

 

Si bien el término contrato inteligente (smart contract) puede sugerir que existe una similitud con los contratos jurídicos tradicionales, es fundamental precisar que se trata de un concepto propio del ámbito tecnológico. Un smart contract es un programa informático que se ejecuta de forma automática en una blockchain cuando se cumplen determinadas condiciones previamente establecidas por las partes. Su principal característica es la automatización de la ejecución contractual, sin necesidad de intervención humana una vez que ha sido desplegado.

 

Estos contratos poseen atributos inherentes a la tecnología blockchain, como autenticación, inalterabilidad, transparencia y trazabilidad, lo que los convierte en una herramienta atractiva para reducir la incertidumbre y los costos de cumplimiento.

 

Sin embargo, su estructura rígida plantea limitaciones para aplicar figuras jurídicas como la lesión, la revisión por desequilibrios sobrevinientes, la valoración de los incumplimientos por causales de fuerza mayor, el reajuste de cláusulas abusivas, etc. En efecto, la ejecución automática es ajena a conceptos abstractos como la buena fe contractual y no puede ponderar principios jurídicos como lo haría un juez a través de la sana crítica racional.

 

Además, la ejecución automática de un smart contract puede depender de la verificación de hechos externos mediante oráculos, es decir, sistemas que suministran información del mundo real a la blockchain. No obstante, cualquier error o manipulación en estos oráculos podría generar inejecuciones o resultados injustos sin posibilidad de corrección interna.

Blockchain y servicios financieros

 

La actividad financiera y bancaria se basa en la gestión de registros confiables, seguros e inalterables, lo que hace que la tecnología blockchain sea una innovación particularmente atractiva para el sector. Su naturaleza descentralizada y su capacidad para garantizar la inmutabilidad, transparencia y trazabilidad de los datos han despertado un creciente interés por parte de instituciones financieras y organismos reguladores[15].

 

La implementación de la blockchain en los servicios financieros ofrece múltiples beneficios, como la reducción de costos de transacción, la optimización de procesos de verificación y cumplimiento normativo (compliance), y la eliminación de intermediarios en ciertas operaciones, lo que agiliza y abarata la ejecución de pagos, liquidaciones y compensaciones. Además, su uso como registro distribuido mejora la seguridad y minimiza el riesgo de fraudes o alteraciones indebidas en los sistemas contables y bancarios[16].

 

A medida que la tecnología evoluciona, los bancos y entidades financieras exploran cada vez más aplicaciones en pagos transfronterizos, financiamiento descentralizado (DeFi)[17], emisión de activos tokenizados y digitalización de valores[18], lo que podría transformar profundamente la industria y su regulación en los próximos años.

Bienes inmuebles y Registros inmobiliarios.

 

Tal como se adelantara en los apartados precedentes, la tokenización de bienes inmuebles permite representar digitalmente la propiedad sobre un inmueble a través de tokens, facilitando su fraccionamiento en partes más pequeñas. Esto posibilita la inversión en bienes raíces con montos accesibles y sin la necesidad de adquirir una propiedad completa, ampliando el acceso a pequeños inversores y mejorando la liquidez del mercado[19].

 

Por otro lado, la aplicación de blockchain en los registros inmobiliarios puede aportar seguridad, transparencia e inmutabilidad a los sistemas de gestión de la propiedad. Actualmente, los registros tradicionales dependen de organismos públicos y notarios, lo que puede generar demoras, riesgos de fraude y corrupción. En cambio, al almacenar títulos de propiedad en una blockchain, se crea un registro descentralizado, inalterable y verificable, eliminando la necesidad de confiar en una autoridad central y reduciendo la posibilidad de fraudes, como la venta múltiple de una misma propiedad.

 

Ahora bien, esta explicación no sería completa sin hacer una aclaración respecto a la tokenización de los bienes inmuebles: la propiedad de un token representativo de un inmueble no equivale al derecho real de dominio sobre el bien.

 

El dominio del inmueble sigue adquiriéndose conforme a las reglas tradicionales atinentes al título y al modo. No obstante, la tokenización permite representar digitalmente ciertos derechos vinculados al inmueble, facilitando su comercialización, fraccionamiento o administración en entornos digitales, sin que ello implique una mutación en el régimen jurídico de la propiedad inmobiliaria.

 

Diversos países han explorado su implementación. En Suecia, la autoridad de registro inmobiliario Lantmäteriet realizó entre 2016 y 2018 una prueba de concepto junto con empresas tecnológicas y bancos locales. Se aplicaron contratos inteligentes para automatizar los trámites de compraventa, reduciendo significativamente la burocracia y los tiempos de transacción. De manera similar, en Nueva Gales del Sur (Australia), el Registro de Tierras colaboró con ChromaWay para desarrollar un sistema basado en blockchain que permitiera la automatización del levantamiento de hipotecas, agilizando los procesos y reduciendo la dependencia de intermediarios[20].

Blockchain y transacciones en juegos

 

El uso de criptomonedas y tecnología blockchain en videojuegos ha permitido la aparición de nuevas formas de microtransacciones y modelos de negocio, como los juegos "play-to-earn" y los activos digitales negociables dentro de los ecosistemas virtuales. Sin embargo, este fenómeno plantea desafíos regulatorios importantes, especialmente cuando involucra a menores de edad.

 

Uno de los principales riesgos es la posibilidad de infantilizar el medio de pago mediante el uso de nombres o diseños llamativos que podrían ocultar la verdadera naturaleza onerosa de la transacción[21]. Esto podría inducir a los jugadores más jóvenes a realizar compras sin plena conciencia del verdadero costo real[22]. Además, la descentralización de las criptomonedas dificulta la aplicación de controles sobre el gasto y la protección del consumidor.

 

Si bien un juez puede declarar la nulidad o ineficacia de una compraventa realizada por un menor de edad, revertir una operación registrada en una blockchain presenta un desafío significativo debido a la inmutabilidad de su estructura. La naturaleza descentralizada y la ausencia de una autoridad central que pueda modificar los registros hacen que, en la práctica, la ejecución de una sentencia que ordene la reversión requiera soluciones alternativas, como la generación de transacciones compensatorias o la implementación de mecanismos previos de control y validación.

 

Si bien varias compañías han explorado este modelo con resultados dispares, gigantes de la industria como Ubisoft, Electronic Arts y Take-Two Interactive han manifestado su interés en integrar tecnología blockchain y NFT en sus juegos[23]. No obstante, algunos actores clave han adoptado posturas más restrictivas. En octubre de 2021, Valve prohibió los juegos basados en blockchain en su plataforma digital Steam, argumentando que permitían la obtención y comercialización de activos con valor en el mundo real, lo que iba en contra de su política sobre contenido transaccional[24].

Blockchain y cadenas de suministros

 

La tecnología blockchain ha demostrado ser una herramienta clave para mejorar la transparencia, seguridad y eficiencia en la gestión de la cadena de suministro. Cada transacción o evento dentro de la cadena logística puede registrarse como un bloque inmutable que contiene información crítica sobre el origen del producto, como el lugar y la fecha de fabricación o extracción, los movimientos dentro de la cadena de suministro, incluyendo almacenamiento, transporte y distribución, así como certificaciones, controles de calidad y cumplimiento normativo. Una vez registrada, esta información no puede alterarse sin el consenso de la red, lo que reduce el fraude, la falsificación y la opacidad en las operaciones comerciales.

 

Gracias a estas características, la blockchain ha sido utilizada para verificar el origen de productos valiosos y asegurar el cumplimiento de estándares éticos medioambientales o humanitarios.

 

En 2016, la empresa Everledger, en asociación con IBM, implementó un sistema basado en blockchain para rastrear el origen de los diamantes y garantizar que fueran extraídos de manera ética[25].

 

En 2018, Walmart e IBM probaron una solución blockchain para monitorear la trazabilidad de productos frescos como lechuga y espinaca. Esta plataforma permitió rastrear el recorrido de los alimentos en segundos en lugar de días, mejorando la capacidad de respuesta ante brotes de contaminación[26].

 

En la industria automotriz, Mercedes-Benz, en colaboración con Icertis, desarrolló un sistema blockchain para documentar contratos en su cadena de suministro, asegurando que los estándares éticos y ambientales aplicados a sus proveedores directos se extendieran a niveles más profundos. En otro proyecto, la compañía implementó blockchain para rastrear las emisiones de gases de efecto invernadero y la cantidad de materiales reciclados utilizados en la fabricación de sus vehículos[27].

Blockchain y derechos de autor. La fotografía, la industria de la música y el pago de regalías.

 

Uno de los principales desafíos en la gestión de los derechos de autor es la identificación precisa de la autoría y la fecha de creación de una obra. Tradicionalmente, los creadores deben registrar sus creaciones en oficinas y registros de la propiedad intelectual, lo que implica costos elevados, burocracia y, en muchos casos, demoras en la acreditación de sus derechos. La tecnología blockchain ofrece una solución innovadora al permitir que un artista, escritor o compositor registre su obra en una cadena de bloques, generando un "hash" único con un sello de tiempo inmutable que prueba su existencia en un momento determinado.

 

Este enfoque ha sido explorado en diversas iniciativas. KodakOne, una plataforma desarrollada por Kodak y Wenn Digital y anunciada en el CES 2018, utilizó blockchain para ayudar a los fotógrafos a proteger y monetizar sus imágenes. A través de un libro digital encriptado, los creadores podían registrar sus obras, rastrear su uso no autorizado mediante inteligencia artificial y recibir pagos inmediatos en la criptomoneda KodakCoin[28]. Sin embargo, el proyecto enfrentó obstáculos regulatorios y técnicos, lo que llevó a su cancelación[29].

 

En 2017, IBM se asoció con ASCAP y PRS for Music para investigar la aplicación de blockchain en la distribución de regalías musicales, mientras que el servicio Mycelia, fundado por la artista Imogen Heap, propuso un sistema basado en blockchain que permite a los músicos tener un mayor control sobre la circulación de sus obras y datos asociados[30].

 

Actualmente, la distribución de regalías en la industria musical depende de múltiples intermediarios, como discográficas, editoriales y sociedades de gestión colectiva, lo que genera comisiones elevadas y retrasos en los pagos. Los contratos inteligentes (smart contracts) representan una alternativa eficiente y transparente: al programar la distribución de regalías dentro de la blockchain, cada vez que una canción es reproducida o comprada, los pagos se ejecutan de forma automática e inmediata, asegurando que los artistas reciban su compensación sin necesidad de terceros.

 

Blockchain no solo mejora la transparencia en la distribución de ingresos, sino que también abre nuevas posibilidades para la descentralización de la industria musical. Plataformas como Ujo Music plantearon la idea de permitir a los artistas vender su música directamente a los consumidores, eliminando intermediarios y garantizando un reparto más equitativo de los ingresos. Además, facilita la protección de los derechos de autor mediante registros inmutables, reduciendo el riesgo de uso no autorizado de las obras[31].

 

El previamente citado Proyecto Mycelia, liderado por Imogen Heap, busca transformar la industria musical con su iniciativa Creative Passport, una identidad digital verificada que contiene información detallada sobre artistas, compositores y creadores, incluyendo perfiles, obras, identificaciones y métodos de pago. Este sistema permite gestionar derechos de autor promoviendo la colaboración entre músicos y asegurando pagos directos y rápidos a través de contratos inteligentes en un ecosistema descentralizado y transparente[32].

Blockchain y su impacto en el arte: los NFT como certificados de autenticidad y propiedad

 

El uso de la tecnología blockchain en el arte ha revolucionado la forma en que se autentican, compran y venden las obras digitales a través de los NFT (tokens no fungibles).

 

Un token no fungible o NFT es un tipo de token criptográfico que representa un activo único. Pueden haber sido creados digitalmente o ser versiones digitalizadas de obras del mundo real que cuentan con un valor real o simbólico importante[33].

 

 A diferencia de las criptomonedas, que son intercambiables entre sí, los NFT son activos digitales con una identidad individual inconfundible que pueden actuar como certificados de autenticidad y propiedad sobre una obra de arte, música, video o cualquier contenido digital.

 

Gracias a la blockchain, los NFT garantizan la escasez y la trazabilidad de la propiedad, lo que ha permitido a los artistas vender sus creaciones directamente al público sin necesidad de intermediarios. Además, mediante smart contracts, los creadores pueden programar regalías automáticas en cada reventa de la obra, asegurando una participación continua en el valor generado por sus piezas en el mercado secundario.

 

Ethereum es la plataforma más utilizada para su emisión, ya que permite la creación de contratos inteligentes que garantizan la trazabilidad de las transacciones. A diferencia del arte tradicional, donde los artistas pierden el rastro de sus obras tras la primera venta, los NFT permiten a los creadores recibir regalías por cada reventa, asegurando ingresos continuos.

 

Ahora bien, así como la tecnología blockchain plantea soluciones concretas, no debe ser vista como libre de problemas. En efecto, la tokenización no autorizada de obras ajenas en el ámbito del criptoarte plantea un grave conflicto en materia de derechos de autor y propiedad intelectual.

 

A diferencia de lo que muchos creen, la tecnología blockchain no verifica la identidad del creador ni certifica que quien tokeniza una obra sea el titular legítimo de los derechos sobre ella. Esto ha llevado a que terceros sin autorización digitalicen y comercialicen contenido ajeno a través de NFTs, apropiándose indebidamente de obras y lucrando con ellas sin el consentimiento de sus autores.

 

Desde una perspectiva legal, esta práctica infringe tanto los derechos morales como los derechos patrimoniales de los autores. El derecho moral garantiza al creador la facultad de reivindicar la paternidad de la obra y oponerse a cualquier alteración o explotación no consentida, mientras que el derecho patrimonial le otorga el monopolio sobre la reproducción, distribución y comercialización de su creación[34]. Cuando un tercero tokeniza una obra sin permiso, no solo vulnera estos derechos, sino que genera confusión en torno a la propiedad y autenticidad de la obra digitalizada.

 

Un problema recurrente en este contexto es la errónea percepción de que la compra de un NFT equivale a la adquisición de los derechos de autor sobre la obra subyacente. En la mayoría de los casos, quien adquiere un NFT solo obtiene la propiedad del token, pero no el derecho de reproducción, distribución o modificación de la obra. Esto significa que, si un NFT ha sido creado sin la autorización del autor, el comprador podría encontrarse en una situación legalmente vulnerable, ya que carece de un título válido sobre el contenido adquirido. Este tipo de conflictos ha llevado a que algunos artistas denuncien públicamente la apropiación indebida de sus obras por parte de terceros en plataformas de NFTs[35].

 

El problema de la tokenización no autorizada ha generado llamados a una mayor regulación del sector. Algunas plataformas han implementado sistemas de verificación de identidad para los creadores, aunque estas medidas aún no son infalibles. También se han desarrollado contratos inteligentes que incluyen términos legales explícitos sobre los derechos asociados al NFT, buscando evitar la confusión entre propiedad del token y propiedad intelectual de la obra. Sin embargo, en ausencia de una normativa específica, los titulares de derechos deben recurrir a mecanismos tradicionales de reclamación por infracción, exigiendo la eliminación de los NFTs fraudulentos y, en algunos casos, una compensación económica[36].

Blockchain en la educación: su uso en credenciales académicas

 

La emisión, autenticación y validación de títulos y certificaciones académicas representan un desafío para las instituciones educativas, ya que los procesos de acreditación pueden tardar semanas o incluso meses, y los documentos físicos o digitales son susceptibles de falsificación, extravío o dificultades en su verificación.

 

La tecnología blockchain ofrece una alternativa innovadora al permitir la digitalización, descentralización y aseguramiento de las credenciales académicas, otorgando a los estudiantes un control total sobre sus títulos y garantizando su autenticidad, unicidad, inmutabilidad y portabilidad.

 

Según el análisis de Mata Hernández y Avendaño Cruz[37], la tecnología blockchain puede transformar la gestión de credenciales académicas al reducir los tiempos de emisión, eliminar la dependencia de intermediarios y prevenir fraudes mediante un registro verificable y permanente. Su implementación en el sector educativo agiliza los procesos administrativos, asegura la autenticidad de las acreditaciones y empodera a los estudiantes, quienes pueden gestionar y compartir sus títulos sin depender de terceros. Además, al proporcionar un sistema de verificación descentralizado, se fortalece la prevención del fraude académico y se facilita la interoperabilidad entre instituciones.

 

A pesar de su potencial, la implementación de blockchain en la educación enfrenta desafíos como la estandarización global, la interoperabilidad entre plataformas y la aceptación por parte de empleadores e instituciones académicas. Sin embargo, a medida que esta tecnología evoluciona, se espera una mayor adopción que permita construir un ecosistema educativo más eficiente, seguro y accesible para todos.

Blockchain, expedientes judiciales y protocolos de sentencias

 

El registro de sentencias judiciales y otras resoluciones dispuestas en el marco de expedientes judiciales a través protocolos oficiales es un paso fundamental para garantizar la seguridad jurídica, la transparencia y la integridad del sistema judicial.

 

Tradicionalmente, este proceso se realiza mediante protocolos públicos, los cuales pueden ser vulnerables a modificaciones no autorizadas, pérdida de información o fallas en la trazabilidad de los documentos.

 

La tecnología blockchain ofrece una alternativa innovadora para fortalecer la gestión y preservación de estos registros al proporcionar un sistema de almacenamiento distribuido e inmutable, asegurando que una vez que una sentencia o resolución sea incorporada a la cadena de bloques, no pueda ser alterada ni eliminada sin dejar evidencia de la modificación.

 

Además de su inmutabilidad, la tecnología blockchain garantiza la transparencia y el acceso eficiente a los protocolos de sentencias. Mediante el uso de huellas criptográficas únicas (hash), cada resolución judicial podría registrarse de manera segura, permitiendo su consulta y verificación sin comprometer datos sensibles. Este mecanismo contribuiría a prevenir el fraude y eliminar la posibilidad de manipulación unilateral de los registros, dado que la información almacenada en blockchain es descentralizada y replicada en múltiples nodos, lo que impide alteraciones indebidas y refuerza la confiabilidad del sistema judicial.

 

Hipotéticamente, también podría estudiarse la posibilidad de ejecutar sentencias a través de contratos inteligentes.

 

Estas posibilidades, sin embargo, lucen todavía muy prematuras en tanto los smart contracts no pueden incorporar conceptos abstractos como la buena fe contractual o la excesiva onerosidad sobreviniente, tal como se explicara anteriormente.

Blockchain y certificación de documentos

 

La certificación de documentos ha dependido históricamente de notarios y registros físicos, lo que conlleva costos elevados, demoras y una burocracia compleja. La tecnología blockchain ofrece un sistema descentralizado que permite verificar la autenticidad de documentos sin necesidad de una autoridad central, lo que plantea interrogantes sobre su impacto en la función notarial y registral.

 

Según Buenos Fisher[38], mientras algunos autores sostienen que la blockchain podría reemplazar a los notarios eliminando intermediarios, él argumenta que su verdadero potencial radica en la integración con la práctica notarial. Desde esta perspectiva, la blockchain no desplaza la figura del notario, sino que puede optimizar los procesos, reducir la burocracia y aumentar la eficiencia en la certificación documental, beneficiando tanto a los profesionales como a la sociedad. La clave, sostiene, está en la colaboración entre la tecnología y la función notarial para modernizar la prestación de servicios sin sacrificar la seguridad jurídica.

 

Por su parte, Falbo[39] analiza el impacto de blockchain en el derecho registral y notarial, advirtiendo sobre el riesgo de equiparar documentos informáticos con instrumentos notariales sin reconocer las diferencias en términos de seguridad y autenticidad. Si bien destaca experiencias exitosas de blockchain en registros de propiedad en países como Estonia y Brasil, subraya que la mera digitalización de documentos no garantiza su validez jurídica. La seguridad informática que proporciona la blockchain evita manipulaciones y fraudes, pero no puede sustituir la validación jurídica y el asesoramiento que brinda un notario en la conformación de actos jurídicos.

 

En este sentido, la adopción de la blockchain en el ámbito notarial y registral debe ser entendida como una herramienta complementaria y no como un sustituto de la función notarial. Su integración puede mejorar la trazabilidad y transparencia de los documentos, pero siempre dentro de un marco normativo que preserve la seguridad jurídica. Así, la combinación de tecnología y práctica notarial representa una oportunidad para modernizar el sistema sin perder de vista su finalidad esencial: garantizar la autenticidad, legalidad y oponibilidad de los documentos en el tráfico jurídico.

Límites y Obstáculos en la Implementación de la Tecnología Blockchain en Diferentes Ámbitos

 

Si bien la tecnología blockchain ha demostrado un enorme potencial en distintos sectores, su implementación enfrenta una serie de desafíos técnicos, regulatorios y operativos que limitan su adopción masiva.

 

Además de los desafíos de escalabilidad e interoperabilidad[40], existe un punto ciego que no debe dejar de apreciarse.

 

A pesar de que la blockchain se caracteriza por su inmutabilidad y seguridad, no está exenta de vulnerabilidades. Los smart contracts, que automatizan acuerdos y procesos, pueden presentar fallas en su programación que deriven en errores irreversibles, como ocurrió en el hack de The DAO en 2016 en la red Ethereum[41].

 

Además, estos contratos dependen de oráculos[42] externos para obtener datos del mundo real, los cuales pueden ser manipulados o contener información incorrecta, llevando a ejecuciones erróneas con consecuencias jurídicas y económicas graves.

 

En el ámbito legal, la falta de regulación clara sobre la blockchain y los smart contracts genera incertidumbre en sectores donde la seguridad jurídica es esencial, como los contratos comerciales y los títulos de propiedad. Aunque los contratos inteligentes permiten la automatización de obligaciones, presentan dificultades para incorporar principios jurídicos fundamentales, como la buena fe contractual, la fuerza mayor o la posibilidad de modificación por acuerdo de partes. Además, una vez desplegados en la blockchain, no pueden adaptarse a cambios normativos o jurisprudenciales, lo que representa un desafío para la ejecución de contratos de largo plazo.

Finalmente, la descentralización, si bien es una de las principales fortalezas de la blockchain, también plantea dificultades en la reversión de fraudes o la corrección de errores en las transacciones. A diferencia de los sistemas tradicionales, donde existen mecanismos administrativos o judiciales para impugnar actos viciados, en el ámbito de lablockchain la falta de una autoridad central complica la reparación de daños, lo que ha llevado a muchos países a ser cautelosos en su incorporación en el marco jurídico.

Dentro del ecosistema de una blockchain no se puede aplicar con carácter general la regulación legal aprobada en los parlamentos nacionales. Algunos autores señalan que esto puede vulnerar ciertos derechos fundamentales[43]. A modo de ejemplo, el carácter inmutable y no editable de los bloques supone que los datos personales incorporados a la blockchain no van a poder modificarse o eliminarse, lo cual choca con el derecho a la privacidad, a la intimidad y conceptos como el derecho al olvido[44].

Estos desafíos evidencian que, aunque la blockchain tiene un gran potencial disruptivo, su adopción efectiva requiere el desarrollo de soluciones tecnológicas más eficientes, estándares de interoperabilidad y marcos normativos que regulen su aplicación sin desnaturalizar sus principios fundamentales.

 

Conclusión

La tecnología blockchain ha demostrado ser una herramienta versátil con un enorme potencial para transformar el ámbito jurídico, registral y contractual. Su capacidad para garantizar la inmutabilidad, descentralización y transparencia de la información la convierte en una alternativa innovadora para la certificación de documentos, la gestión de derechos de propiedad y la optimización de procesos financieros. A pesar de los desafíos regulatorios y técnicos que aún enfrenta, su implementación en sectores como los registros y la industria musical evidencia su viabilidad y beneficios. No obstante, su adopción no implica la eliminación de figuras tradicionales como los notarios o los reguladores estatales, sino que plantea la necesidad de una integración que combine la seguridad jurídica con la eficiencia tecnológica. En este sentido, la blockchain no debe ser vista como un sustituto absoluto, sino como una herramienta complementaria que, bien utilizada, puede mejorar significativamente la transparencia y la accesibilidad en el ámbito jurídico y económico.



(*) Abogado egresado sobresaliente (UNC). Especialista en Derecho Procesal de las Ejecuciones (UBP), Investigador (CIJS - UNC), Asistente de Magistrado y Relator de la Fiscalía de Cámaras de Familia del Poder Judicial de la Provincia de Córdoba.

[1] OCDE, Science, Technology and Innovation Outlook 2016, pp. 107-110, https://readoecd-ilibrary.org/science-and-technology/oecd-science-technology-and-innovation-outlook-2016_sti_in_outlook-2016-en#page1 (Consultado el 22/02/2025).

[2] Degano, Germán Augusto y Salvi, Leandro. Blockchain y su impacto en los sistemas de justicia. Revista de Derecho Procesal. Gestión e innovación en el proceso. 2023-1 p. 305-333.

[3] Morales Barroso, J. ¿Qué es blockchain? en Criptoderecho. La Regulación de Blockchain, Dir. P. García Mexía, Wolters Kluwer, 2018, p. 43.

[4] Aunque este tipo de precisiones técnicas exceden el contenido del presente artículo, también es cierto que existen mecanismos como los hard forks, contratos inteligentes con cláusulas de reversión y mecanismos como las "multisig transactions" que pueden permitir cierto grado de reversibilidad en situaciones específicas.

[5] Jiménez Serranía, Vanessa. La Blockchain como medio de protección del diseño: “Design blockchain by design”. Cuadernos Del Centro De Estudios De Diseño Y Comunicación, (106). 2020. https://doi.org/10.18682/cdc.vi106.4041

[6] No es objeto de este trabajo profundizar en aspectos técnicos. Sin embargo, se recomienda encarecidamente la lectura de Shermin Voshmgir "Token Economy: How the Web3 reinvents the Internet" Segunda edición, Junio 2020. Traducción obtenida de https://github.com/Token-Economy-Book/SpanishTranslation/wiki

[7] Tapscott, D. Y Tapscott, A., Blockchain Revolution, Peguin Radom House, Nueva York, 2018.

[8] Alveolite, Adrian L. Resqui Pizarro, Jorge C. Tokenización, blockchain, criptoactivos, smart contracts y metaverso en el mercado inmobiliario y de la construcción. Aspectos prácticos y legales. Derecho Comercial y de las Obligaciones; 2022 no. 316, p. 3.

[9] Alveolite, Adrian L. Resqui Pizarro, Jorge C., 2022, ibidem.

[10] El lector no debe pensar que la cotización de un token siempre será racional. También puede ser objeto de burbujas y especulaciones como todo producto en un mercado.

[11] La moneda fiduciaria es aquella cuyo valor depende de la confianza en quien la emite. En definitiva, son las monedas que se usan a diario y que son emitidas por los Bancos Centrales de los países sin respaldo en oro u otro activo.

[12] El dólar estadounidense, como toda moneda fiduciaria, tampoco garantiza absoluta preservación del poder adquisitivo. Aunque sea una obviedad, cabe recordar que también es objeto del fenómeno inflacionario.

[13] Como resultado, en 2023, Argentina se posicionó en el puesto número 15 del Índice Global de Adopción de Criptomonedas (Nuñez, Tulio. En pleno auge del Bitcoin, la regulación de los proveedores de activos virtuales es un paso estratégico. Perfil. Publicado el día 12/11/2024. Consultado el 03/12/2024 en https://www.perfil.com/noticias/economia/en-pleno-auge-del-bitcoin-la-regulacion-de-los-proveedores-activos-viturales-es-un-paso-estrategico.phtml)

[14] Ayuso, J., & Conesa, C. Una introducción al debate actual sobre la moneda digital de banco central (CBDC) (No. 2005). Banco de España. Año 2020; Infante, S., Kim, K., Silva, A. F., & Tetlow, R. J. The macroeconomic implications of CBDC: A review of the literature. Año 2022; Arabaolaza López, M. Análisis teórico sobre las CBDC. Año 2023.

[15] Kelly, Jemima. "Banks adopting blockchain 'dramatically faster' than expected: IBM". Reuters. 2016.

[16] Kimani, Danson; Adams, Kweku; Attah-Boakye, Rexford; Ullah, Subhan; Frecknall-Hughes, Jane; Kim, Ja. "Blockchain, business and the fourth industrial revolution: Whence, whither, wherefore and how?". Technological Forecasting and Social Change. 161: 120254. doi:10.1016/j.techfore.2020.120254. ISSN 0040-1625. Fecha 1/12/2020

[17] DeFi o Finanzas descentralizadas apunta a eliminar la necesidad de intermediarios tradicionales, como bancos y corredores, y permitir realizar transacciones de préstamos, intercambios, inversiones y otros servicios financieros de manera autónoma y transparente sin necesidad intervención humana.

[18] La digitalización de valores y la tokenización son conceptos relacionados con la transformación de activos financieros, pero no son lo mismo.

Digitalización de valores se refiere al proceso de convertir activos tradicionales (acciones, bonos, fondos de inversión, etc.) en representaciones digitales dentro de sistemas informáticos. Este proceso no implica necesariamente el uso de blockchain ni la creación de tokens, sino que moderniza la gestión, emisión y negociación de los valores mediante plataformas electrónicas. La tokenización, en contraste, consiste en representar un activo financiero (acciones, bonos, inmuebles, obras de arte, etc.) en forma de token en una blockchain. El token es una unidad digital que certifica la propiedad y permite su negociación descentralizada. La tokenización permite fraccionar activos en partes más pequeñas (democratizando el acceso a la inversión), facilita la liquidez y reduce costos de intermediación.

[19] Alveolite, Adrian L. Resqui Pizarro, Jorge C. Tokenización, blockchain, criptoactivos, smart contracts y metaverso en el mercado inmobiliario y de la construcción. Aspectos prácticos y legales, Derecho Comercial y de las Obligaciones; 2022 no. 316, p. 3

[20] Miller, Todd. Dos casos de aplicación de blockchain a los registros de propiedad: Suecia y NSW Australia LAC Property. S. f. Consultado el 21/02/2025 en

https://www.lacpropertychain.com/blog/dos-casos-de-aplicacin-de-blockchain-a-los-registros-de-propiedad-suecia-y-nsw-australia Extracto de Bennett, R.; Miller, T.; Pickering, M.; Kara, A.-K. Hybrid Approaches for Smart Contracts in Land Administration: Lessons from Three Blockchain Proofs-of-Concept. Land 2021, 10, 220. https://doi.org/ 10.3390/land10020220

[21] Se propone profundizar en este problema en Peláez Moll, German. La protección jurídica del pequeño inversor en criptomonedas y demás criptoactivos. Eldial.com. 2024. https://tienda.eldial.com/productos/paper-la-proteccion-juridica-del-pequeno-inversor-en-criptomonedas-y-demas-criptoactivos/?srsltid=AfmBOorfL6sCB2ynM4sPVb95x820IJUGYjrRwfOFwVcXrMT4ZLMtN-Rq

[22] Un grupo de organizaciones europeas de defensa del consumidor ha solicitado a la Comisión Europea y a la Red de Cooperación para la Protección del Consumidor (CPC-Network) que tomen medidas contra el uso de monedas digitales en los videojuegos. Estas entidades argumentan que algunas compañías de videojuegos emplean monedas virtuales dentro de los juegos para incentivar el gasto excesivo de los consumidores, especialmente entre los más jóvenes, mediante prácticas que consideran manipuladoras. La petición busca una aplicación más estricta de las leyes existentes para proteger a los usuarios de posibles abusos en este ámbito (Charani, M., Piden que la Unión Europea tome medidas contra el dinero digital en juegos. CriptoFácil. Fecha 22/9/2024. Recuperado de https://www.criptofacil.com/es/piden-que-la-union-europea-tome-medidas-contra-el-dinero-digital-en-juegos/).

[23] Orland, Kyle. "Big-name publishers see NFTs as a big part of gaming's future". Ars Technica. 2021.

[24] Knoop, Joseph. "Steam bans all games with NFTs or cryptocurrency". PC Gamer. 2021. Consultado en https://www.pcgamer.com/steam-bans-nfts-cryptocurrencies-blockchain/

[25] Nash, Kim S. "IBM Pushes Blockchain into the Supply Chain". The Wall Street Journal. 2016

[26] Corkery, Michael; Popper, Nathaniel. "From Farm to Blockchain: Walmart Tracks Its Lettuce". The New York Times. 2018.

[27]  Mercedes-Benz AG, Mercedes-Benz Cars drives "Ambition2039" in the supply chain: blockchain pilot project provides transparency on CO emissions. 2020. Consultado en https://media.mercedes-benz.com/article/ff705327-be61-4b15-9eee-2c1a53c9b0e6

[28] Lopes, M. ¡A prueba de ladrones! La nueva plataforma de Kodak detectará imágenes robadas. Digital Trends Español. 2021. Consultado en https://es.digitaltrends.com/fotografia/kodak-kodakone-criptomonedas-blockchain/

[29] Gerard, D. News: KodakCoin is dead, XRP RIP, US on stablecoins, seasteading fails again. Attack of the 50 Foot Blockchain. 2020. Consultado en https://davidgerard.co.uk/blockchain/2020/12/24/news-kodakcoin-is-dead-xrp-rip-us-on-stablecoins-seasteading-fails-again/

[30] Music Business Worldwide. ASCAP, PRS and SACEM join forces for blockchain copyright system. 2017. Consultado en https://www.musicbusinessworldwide.com/ascap-prs-sacem-join-forces-blockchain-copyright-system/; Harle, N., & Burchardi, K. The blockchain will disrupt the music business and beyond. WIRED. 2018. Consultado en https://www.wired.com/story/blockchain-disrupting-music-mycelia/

[31] Hazlitt, R. Ujo Music lanzará una plataforma Blockchain para músicos. DiarioBitcoin. 2016 Consultado en https://www.diariobitcoin.com/noticias/ujo-music-lanzara-una-plataforma-blockchain-para-musicos/

[32] Alexis. Proyecto Mycelia: blockchain puede catapultar la industria musical. Crypto Economy. 2018. Consultado en https://crypto-economy.com/es/proyecto-mycelia-blockchain-puede-catapultar-la-industria-musical/

[33] Gorrasi, Verónica Noemi. Criptoarte en Argentina y en el mundo. Cómo regularlo sin aniquilarlo. Revista Argentina de Derecho Comercial y de los Negocios – Número 26 – Mayo 2022. Fecha 16/05/2022 Cita: IJ-MMMI-521.

[34] Emery, Miguel Angel. Propiedad Intelectual. Ley 11723 Comentada, anotada y concordada con los tratados internacionales. Ed. Astrea. 2014.

[35] Se propone profundizar la problemática en Gomez Larruy, Alejandra. Los NFTs y su relación con los derechos de autor. Tesis final de grado en Derecho. Curso académico 2023-2024. Universitat Pompeu Fabra.

[36] Crisafulli, M. NFT e infracción de la propiedad intelectual. Ars Iuris Salmanticensis, 12, 11-24. Año 2024. https://doi.org/10.14201/AIS20241211124

[37] Mata Hernández, J. M., & Avendaño Cruz, S. Blockchain en la educación: su uso en credenciales académicas. Revista digital universitaria, 23(1). 2022.

[38] Buenos Fisher, J. F. Nuevas tecnologías, "Blockchain" y la función notarial. ONPI – Oficina Notarial Permanente de Intercambio Internacional. S. f. Recuperado de https://onpi.org.ar/nuevas-tecnologias-blockchain-y-la-funcion-notarial-por-jose-flavio-buenos-fisher/

[39] Falbo, M. N.. El blockchain en la actividad jurídica registral y notarial y reflexiones sobre la evolución del pensamiento sobre estos temas. Revista del Notariado, (934), 112-124. 2019.

[40] Los desafíos de escalabilidad hacen referencia a la velocidad y volumen de transacciones de información. Los desafíos de interoperabilidad refieren a permitir que distintas blockchain puedan interactuar entre sí.

[41] Distéfano, B. Ni Wasabi Wallet pudo ocultar la identidad del hacker que robó USD 11 mil millones. CriptoNoticias. 2022. https://www.criptonoticias.com/seguridad-bitcoin/wasabi-wallet-ocultar-identidad-hacker-robo-usd-11-mil-millones/

[42] Los oráculos atinentes a los smart contracts son servicios que les proporcionan información externa del mundo real que no está disponible en la blockchain. Debido a que las blockchains están diseñadas para ser sistemas cerrados y autónomos, los contratos inteligentes no pueden acceder directamente a datos fuera de la red. Los oráculos resuelven este problema al actuar como puentes entre la blockchain y fuentes externas de información, permitiendo que los smart contracts tomen decisiones basadas en datos del mundo real.

[43] Celis Gutiérrez, Eduardo. Derechos Fundamentales y tecnología Blockchain. Tesis de Maestría en derecho de la ciberseguridad y entorno digital. Facultad de derecho. Universidad de León. Curso 2019/2020.

[44] Celis Gutiérrez, Eduardo, op. cit.